¿Qué hace más resistente las bacterias a los antibióticos?

La resistencia a los antibióticos es un problema creciente en la salud pública a nivel mundial. Sin embargo, la resistencia a los antibióticos surge principalmente debido al uso inapropiado y excesivo de antibióticos tanto en la medicina humana como en la agricultura.

La resistencia a los antibióticos ocurre cuando las bacterias evolucionan y desarrollan la capacidad de sobrevivir a los efectos de los antibióticos, lo que puede deberse a modificar genéticamente o a la transferencia de genes de resistencia entre bacterias.

Hay varias formas en las que las bacterias pueden volverse resistentes a los antibióticos:

Mutaciones genéticas: Las bacterias pueden adquirir cambios en sus genes que les otorgan resistencia a los antibióticos. Estos cambios pueden ocurrir de forma natural con el tiempo o pueden ser inducidas por la exposición repetida a los antibióticos.

Transferencia de genes: Las bacterias pueden transferir genes de resistencia antibiótica entre sí a través de un proceso llamado transferencia horizontal. Esto permite que las bacterias adquieran rápidamente la capacidad de resistir los antibióticos al recibir genes de otras bacterias resistentes.

Uso indebido de antibióticos: El uso inapropiado de antibióticos, como no completar un ciclo de tratamiento prescrito, tomar antibióticos sin receta médica o usar antibióticos para tratar enfermedades virales, puede contribuir al desarrollo de resistencia. Las bacterias que sobreviven a la exposición inicial a los antibióticos tienen más probabilidad de desarrollar resistencia y transmitir estos rasgos a generaciones futuras.

Uso excesivo de antibióticos en la agricultura: El uso excesivo de antibióticos en la cría de animales y la agricultura puede llevar a la propagación de bacterias resistentes. Las bacterias en animales y productos agrícolas pueden transferir sus genes de resistencia a las bacterias que evolucionan a los humanos.

Falta de desarrollo de nuevos antibióticos: La falta de desarrollo de nuevos antibióticos ha llevado a que algunas bacterias se vuelvan resistentes a los medicamentos existentes, ya que estas bacterias han tenido tiempo de evolución mientras los antibióticos disponibles no han cambiado significativamente.

La resistencia antibiótica es un problema grave en la salud pública, ya que puede dificultar el tratamiento de infecciones bacterianas comunes y aumentar la morbimortalidad. Para abordar este problema, es importante utilizar los antibióticos de manera responsable, completar los ciclos de tratamiento prescritos, evitar el uso de antibióticos y fomentar la investigación y el desarrollo de nuevos antibióticos.