El aspartame es un edulcorante artificial ampliamente utilizado en la industria alimentaria como sustituto del azúcar. Fue descubierto en 1965 por James Schlatter, un químico de la compañía G.D. Searle & Company, mientras trabajaba en la síntesis de un medicamento contra las úlceras. El aspartame fue aprobado para uso en alimentos en la década de 1980 en varios países y ha sido considerado seguro por las autoridades reguladoras de alimentos, incluida la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) de los Estados Unidos y la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA).
El aspartame es un compuesto químico formado por la unión de dos aminoácidos: ácido aspártico y fenilalanina, junto con un enlace metilo que les da su dulzor. Su poder edulcorante es aproximadamente 200 veces mayor que el azúcar, lo que significa que se necesita una cantidad mucho menor para lograr el mismo nivel de dulzor.
El aspartame se encuentra en una amplia variedad de alimentos y bebidas sin calorías o bajas en calorías, como refrescos, chicles sin azúcar, productos lácteos, edulcorantes de mesa y alimentos procesados. Debido a su potente dulzura, solo se requieren pequeñas cantidades para endulzar los productos, lo que contribuye a su popularidad como sustituto del azúcar, especialmente en productos dirigidos a personas que buscan reducir su ingesta de calorías o controlar la diabetes.
Sin embargo, el aspartame ha sido objeto de controversia en algunos círculos debido a la presencia de fenilalanina, que es un aminoácido que puede ser tóxico en grandes cantidades para las personas con fenilcetonuria (PKU), una enfermedad metabólica hereditaria. Las personas con PKU deben evitar el aspartame y otros edulcorantes que contengan fenilalanina.
Por parte de La OMS
La Organización Mundial de la Salud (OMS) decidió mantener en sus niveles actuales como las recomendaciones que hace sobre la cantidad del endulzante artificial aspartame que se considera como “segura” para el consumo humano.
La decisión viene luego de que dos grupos de expertos de la OMS revisaran miles de estudios científicos sobre la seguridad del aspartame, y sobre su clasificación como “posible cancerígeno”.
Cuando se oye la clasificación de “posible cancerígeno” es común que se genere una controversia y miedo, confusión, pero el término solo quiere decir que la evidencia no es convincente.
La mayoría de las personas que consumen una cantidad de aspartame inferior al límite superior se considera «seguro», pero la OMS recomienda que los consumidores asiduos disminuyan su uso.
Para tener en cuenta, ¿Cuánto aspartame es “seguro”?
El comité de expertos de la OMS encargado de los aditivos a los alimentos es el que se encarga de establecer cuáles son las dosis seguras para el consumo.
Analizó no solo el riesgo de cáncer, sino otras posibles enfermedades como las enfermedades coronarias y la diabetes tipo 2, pero “no encontró razón suficiente” para cambiar las recomendaciones en pie desde 1981.
Así que los límites seguros se mantienen en 40 miligramos por kilogramo de peso de tu cuerpo por día.
Hay que recordar que, recientemente, la OMS aseguró que las bebidas con endulzantes artificiales no ayudan a las personas a perder peso.
Nota: Para la mayoría de las personas que no tienen condiciones médicas específicas, el aspartame es considerado seguro cuando se consume dentro de los límites establecidos por las autoridades reguladoras. Como con cualquier edulcorante o aditivo alimentario, es importante mantener un equilibrio en la dieta y consumirlos con moderación. Siempre es recomendable seguir las pautas dietéticas y las recomendaciones de los profesionales de la salud.
Más historias
ESTRATEGIAS QUE USA LA INDUSTRIA DE BEBIDAS AZUCARADAS PARA BLOQUEAR POLÍTICAS QUE PROMUEVEN LA SALUD
PAPÁ LE PROHÍBE A SU HIJA TENER REDES SOCIALES
ALERTA EN EL HUILA, SE REPORTÓ CASO DE VIRUELA SÍMICA