Problemas de desorden de afectos o de estado de ánimo

El trastorno bipolar, también conocido como trastorno afectivo bipolar, es una condición psiquiátrica crónica que se caracteriza por cambios extremos en el estado de ánimo. Las personas que padecen este trastorno experimentan episodios de manía o hipomanía, así como episodios depresivos.

Durante los episodios de manía, la persona puede experimentar una euforia excesiva, aumento de la energía, disminución de la necesidad de dormir, aumento de la actividad, hablar rápidamente, tener ideas grandiosas o delirios, tomar decisiones impulsivas o riesgosas, y tener dificultades para concentrado. Estos episodios de manía pueden durar varios días o incluso semanas.

Por otro lado, durante los episodios depresivos, la persona experimenta una profunda tristeza, pérdida de interés en actividades que antes disfrutaba, cambios en el apetito y el sueño, fatiga, sentimientos de culpa o inutilidad, dificultades para aumentar, y en casos más graves, pensamientos suicidas. Estos episodios depresivos pueden durar semanas o meses.

Es importante destacar que los episodios maníacos y depresivos pueden variar en su intensidad y duración entre diferentes personas. Algunas personas pueden experimentar episodios mixtos, que incluyen síntomas de manía y depresión al mismo tiempo.

El trastorno bipolar es una enfermedad crónica y recurrente, y su causa exacta aún no se conoce completamente. Sin embargo, se cree que hay factores genéticos, químicos y ambientales que contribuyen a su desarrollo. El tratamiento del trastorno bipolar generalmente implica una combinación de medicación y terapia psicoterapéutica, y puede ayudar a las personas a llevar una vida equilibrada y funcional. Si sospecha que usted o alguien que conoce podría estar experimentando síntomas de trastorno bipolar, es importante buscar ayuda profesional para recibir un diagnóstico adecuado y un plan de tratamiento adecuado.